BERT DAELEMANS

A ORILLAS DEL YUKON

BERT DAELEMANS

Encuadernación: Rústica

Una aproximación singular a la cultura de los esquimales de Alaska. Se recoge la pervivencia de ritos y costumbres ancestrales en un contexto cristiano. El libro, escrito con una prosa atractiva y de una gran sensibilidad poética, nos enseña a mirar y caminar por el mundo de forma sagrada. Sus páginas despiertan la capacidad de reconocer la verdad, la belleza y la bondad que se ocultan en la tierra.

EL ABRAZO EN EL ARTE UN RECORRIDO ESPIRITUAL

BERT DAELEMANS

Encuadernación: Rústica

El abrazo es de todos; un arte divinamente humano. Al igual que en la vida, el abrazo abunda en el arte, pero lo hace de modo discreto. Este libro recoge treinta abrazos de varios artistas, donde se desenvuelven escenas muy corrientes y cotidianas. Una muestra o colección que resalta lo mejor del ser humano: su capacidad para trascenderse, de abrirse, de salir de sí mismo y de abrazar a otra persona. Para aprovechar aún más el trasfondo espiritual del arte, se adjunta el cuaderno "Fichas de oración". En él se ofrecen pautas sencillas para rezar con las imágenes de este libro. Siguiendo el formato ignaciano de ocho días de ejercicios espirituales, y la dinámica y la mistagogía propuestas por san Ignacio, se ofrecen aquí sugerencias, lecturas bíblicas, pistas y oraciones para llevar el arte a su más excelsa cima, donde Dios habla de tú a tú.

EL SUSURRO DE LOS PETALOS

BERT DAELEMANS , CRISTINA ALMODÓVAR BOAL

Encuadernación: Cartoné

LA VULNERABILIDAD EN EL ARTE UN RECORRIDO ESPIRITUAL

BERT DAELEMANS

Encuadernación: Rústica

Este libro da cuenta de treinta encuentros con la fragilidad. El arte más atractivo es tal vez aquel capaz de hablar de nuestra fragilidad sin ser hiriente y, en el mejor de los casos, de abrir la puerta hacia la vulnerabilidad, tendiendo un puente a lo sencillo, a Dios. En este sentido, el siguiente recorrido a través de treinta obras de arte aspira a ser espiritual.

VIA CRUCIS BRILLE LA LUZ DE SU ROSTRO

BERT DAELEMANS

Encuadernación: Rústica

Este Vía Crucis nace del encuentro con una obra de arte fascinante, tallada en bronce por el artista Werner Klenk. Bajo la forma de ejercicios espirituales, las quince bellas estaciones nos permiten acompañar al Señor en su camino de la cruz para experimentar con él la resurrección y dejar que brille sobre nosotros la luz de su rostro.